Aforismos Miscelánea

El verdadero discípulo es el que supera al maestro.

Cuanto más nos inclina la naturaleza a los placeres, tanto más propensos somos a la licencia que a la decencia.

Mercaderes e industriales no deben ser admitidos a la ciudanía, porque su género de vida es abyecto y contrario a la virtud.

No hay que prestar atención a quienes nos aconsejan, so pretexto de que somos hombres, no pensar más que en las cosas humanas y, so pretexto de que somos mortales, renunciar a las cosas inmortales.

Todos los aduladores son mercenarios, y todos los hombres de bajo espíritu son aduladores.

No todo término merece el nombre de fin, sino tan sólo el que es óptimo.